Alcachofas guisadas con jamón y tomate

Alcachofas guisadas con jamón y tomate, una receta muy fácil de hacer que además podéis tener preparada con antelación.

Las alcachofas cocinadas así quedan muy tiernas y con mucho sabor, hay que aprovechar que esta excelente y saludable verdura está aún en temporada.

A continuación os explico cómo hacer Alcachofas guisadas con jamón y tomate, la receta explicada paso a paso para que no tengáis ninguna duda a la hora de hacerlas y que os salgan bien a la primera.

Receta de Alcachofas guisadas con jamón y tomate, explicada paso a paso.

Ingredientes

• 8 alcachofas
• 3 dientes de ajo
• 120 g de jamón serrano
• 1 cucharada de pimentón dulce
• 4 cucharadas de tomate frito
• 1 limón
• 1 rebanada de pan
• 50 g de almendras crudas
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal
• Pimienta

Elaboración

Para preparar esta receta he utilizado unas estupendas Alcachofas de Benicarló, una de los mejores productos de Valencia. Son unas alcachofas que tienen Denominación de Origen Protegida desde el año 1998, se cultivan en más de 300 hectáreas inscritas, repartidas en las localidades de Benicarló, Peñíscola, Càlig y Vinaròs, siempre cultivadas bajo estrictas normas de calidad y reglamentación, que va desde su recogida en los campos, su selección, envasado, etiquetado y expedición.

La alcachofa de Benicarló se diferencia de otras por la ubicación de los cultivos, al sembrase entre el Mar Mediterráneo y las suaves planicies del Bajo Mestrazgo, “Baix Maestrat”, de Castellón, con temperaturas generosas todo el año, se crea en esta zona un micro-clima ideal para su plantación. Gracias a ello se consigue esa textura prieta de sus hojas y un corazón más grande y sabroso. A mí me las han mandado desde la Cooperativa Benihort que tienen tienda online, donde podéis comprar las alcachofas y también un montón más de productos muy interesantes, echadle un ojo.

Para cocinar este estupendo plato lo primero que haremos será limpiar las alcachofas, cortamos la punta, eliminamos las hojas exteriores más duras y con un cuchillo pelamos el rabo.

Las partimos en cuatro trozos.

Tendremos un recipiente con agua y el zumo de medio limón, donde iremos metiendo las alcachofas según vayamos arreglando, de esta forma impediremos que se oxiden y se pongan negras.

En una cazuela ponemos un poco de aceite de oliva virgen extra, picual, y freímos el pan y las almendras.

Una vez que están dorados, sacamos y pasamos al mortero.

Y majamos bien, esto podéis hacerlo también con batidora y un poco de agua para que ayude a batir. Reservamos este majado.

En la misma cazuela, si hiciera falta añadimos un poco más de aceite, ponemos los ajos picados, cuando comiencen a dorarse incorporamos el jamón serrano picado.

Cocinamos un poco…

Y ponemos el pimentón dulce

Junto con el tomate frito

Mezclamos todo

E incorporamos las alcachofas escurridas.

También añadimos el majado que teníamos reservado de pan y almendras.

Mezclamos todo y añadimos también un poco de sal y de pimienta.

Ponemos el zumo del otro medio limón, el otro se lo habíamos puesto al agua de las alcachofas.

Y ponemos agua hasta cubrir las alcachofas.

Dejamos cocinar a fuego fuerte unos minutos, bajamos el fuego y dejamos que se cocinen a fuego suave unos quince minutos moviendo la cazuela de vez en cuando.

Ya tenemos listas las alcachofas guisadas. Como os decía al principio, podéis tenerlas preparadas desde el día anterior, incluso están mejor.

Unas alcachofas tiernas, muy jugosas y con mucho sabor.

Espero que os haya gustado esta receta de Alcachofas guisadas con jamón y tomate y que os animéis a hacerla.

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