Tarta sueca de manzana. Receta paso a paso y sorteo del libro Postres caseros de Amanda Laporte
Ojeando el libro Postres caseros de Amanda Laporte me llamó la atención la Tarta sueca de manzana, bueno…esta tarta y muchas otras recetas, porque el libro está genial. Me ha gustado mucho, son postres de siempre, muchos los ha preparado en su programa de Canal Cocina, es de la editorial Grijalbo. Y como no quería poneros los dientes largos quiero compartir otro ejemplar con vosotros, así que voy a sortear uno entre todos los seguidores de Cocinando entre Olivos.
Tarta sueca de manzana. Receta paso a paso.
Ingredientes
- 150 gr de mantequilla
- 150 gr de azúcar
- 2 huevos
- 100 gr de almendras molidas
- 50 gr de harina
- 1 cucharadita de levadura química
- 3 manzanas ácidas
- 1 cucharada de canela
- 1 cucharada de azúcar glass
Elaboración
Ponemos en un cuenco amplio la mantequilla, a temperatura ambiente, debe estar blanda, y el azúcar.
Los huevos.
La almendra molida, si la tostáis un poco el sabor será aún más delicioso.
La harina y levadura. Mezclamos todo.
Ya tenemos nuestra mezcla lista.
Pelamos las manzanas y rallamos. A mí para las tartas, me gusta usar manzanas ácidas o reinetas, pero estas últimas me cuesta mucho conseguirlas.
Utilizamos un molde redondo para tartas desmontable, yo no tenía molde pequeño, así que he usado uno de 20 cm, al que le he puesto una base de papel de horno. Luego me he ayudado de otro plato para desmoldar y no he tenido problema.
Ponemos una base con la mitad de la mezcla, os aviso la mezcla es algo pegajosa.
¡Por fin! Objetivo conseguido…no os desesperéis.
Ponemos la manzana rallada, yo no la he rallado, la he cortado en láminas muy finitas. Espolvoreamos con la otra mitad del azúcar, 75 gramos y la canela.
Ponemos el resto de la masa por encima. Si, sé que la masa sigue muy difícil de manejar, pero os aseguro que merece la pena. Yo he terminado poniendo los bordes a pellizquitos.
Cocemos la tarta en el horno, precalentado, a 180ºC durante 30 minutos. Yo la he horneado con calor circular, aire.
Sacar la tarta del horno y dejarla enfriar por completo.
Meter un par de horas en la nevera, desmoldarla.
Servir espolvoreada con azúcar glass.
No voy a señalar a nadie porque eso está muy feo, pero sé de alguien que no espero a que la tarta se enfriara, y dicen que tibia es placer de dioses.